La albahaca

 

Albahaca. Fruvesur

La albahaca aunque poco conocida en la cocina española, tiene numerosas utilidades como condimento y planta aromática. Podemos encontrarnos en el mercado tanto la albahaca fresca como seca, siendo su sabor diferente. La albahaca fresca sabe similar al clavo, mientras que la albahaca seca tiene un sabor más parecido al del curry.

En cuanto a la conservación de esta planta, debemos de tener en cuenta los siguientes consejos: para almacenar esta planta aromática fresca, nunca debemos meterla en la nevera ya que se pierde su aroma. Sí se puede conservar en un tarro de cristal sumergiéndola en aceite de oliva. Las hojas secas por el contrario deben ser almacenadas en tarros herméticos, lejos de la luz y la humedad.

Podemos utilizar la albahaca para condimentar ensaladas, pastas y pizzas. Se puede además añadir como aromatizante para platos con pescados y carne asada. Y sobre todo se utiliza en la elaboración de salsas, como la salsa de tomate, la salsa al pesto, etc.  Se recomienda que se use con moderación e incorporarlas al final de la elaboración,  ya que aumenta su sabor durante el cocinado. Personas que no estén acostumbradas a sabores tan fuertes pueden no tolerarla.